Add parallel Print Page Options

13 Ya saben que fue una enfermedad la que me dio la oportunidad de anunciarles por vez primera el mensaje evangélico. 14 Y, aunque mi estado físico debió de ser una dura prueba para ustedes, no me despreciaron ni sintieron asco de mí. Al contrario, me acogieron como a un mensajero de Dios, como si fuera el mismo Cristo Jesús. 15 ¿Qué ha sido de aquel entusiasmo? Porque estoy seguro de que ustedes hasta los ojos se habrían arrancado, a ser posible, para dármelos a mí.

Read full chapter